Señores, terminó la telenovela “La Calumniada” que tenía como protagonistas a Nancy Pelosi y Donald Trump, con un reparto compuesto por legisladores demócratas y republicanos. Con la actuación especial de Mitch McConnell y Teodoro Cruz. Al final los protectores de la Calumniada votaron en contra de que fuera enjuiciada, lo cual le permitirá volver al Hollywood de Washington a hacer otra película de terror como la que hizo en los cuatro años del 2017 al 2021.
¡Que San Pancracio nos libre de ese batracio!
Los senadores republicanos decidieron votar en contra de enjuiciar a Trump por temor a represalias de sus votantes, lo que quiere decir que el racismo en Estados Unidos sigue tan fuerte como en los años 60. Solo que no nos habíamos dado cuenta porque lo disimulaban muy bien. Pero ahora, luego de haber tenido a un racista como presidente, los discriminadores raciales no tienen nada que ocultar.
En el programa Comentando Los Hechos de El Vocero Hispano TV, un televidente expresó la siguiente opinión: “Trump no hizo nada para que quieran crucificarlo”. Si es así, ¡Que bueno que no hizo nada, porque si hubiera hecho, los hispanos y los negros estuviéramos colgando a la orilla de las carreteras, prendidos en fuego como lámparas de camino!
Cambiando de tema, el presidente Biden todavía no ha realizado cambios fundamentales en la política exterior norteamericana. No ha restituido las relaciones que abrió Obama con Cuba, ni ha definido como será su relación con Latinoamérica. Esperamos que actúe como un hombre y revierta las locuras criminales de su antecesor, Donald Trump. ¿Por qué criminales? Porque éste incrementó las sanciones económicas contra Cuba y Venezuela sin importarle que nos encontramos en medio de la pandemia. Producto de esas medidas absurdas de una mente degenerada, miles de personas han muerto del Covid.
Según un grupo de economistas, Venezuela está subsistiendo con el uno por ciento de lo que fueron sus ingresos hace 15 años. La administración de Trump le incautó su principal fuente de ingresos que es la venta de petróleo a Estados Unidos. Le quitó la empresa Citgo y se la dio a un oportunista que supuestamente va a “liberar a Venezuela”. Le incautó 30 mil millones de Dólares a la empresa, con lo que muchos venezolanos hubieron puesto un pan en la mesa.
Con el dinero de Citgo, el famosos Juan Guaidó, se está dando la vida de rey por el mundo mientras los venezolanos se amarran las tripas para aguantar el hambre
El drama que vive Venezuela no es solo culpa de los malos actores como Maduro, sino de los que le quitaron el 99 por ciento de sus ingresos.
Los países de América Latina están acudiendo a la compra de vacunas en Rusia y China, porque su amigo el Tio Sam, no le ha pasado ni una tizana para aliviarse del Coronavirus. Hasta los gobiernos mas lambones del gran país del norte han tenido que buscar ayuda en otro lado.
Bueno, ahí lo tienen para que aprendan. Los países tienen que tener políticas internacionales independientes, no lamberles las botas a nadie. Un presidente que es pro americano, pro ruso o pro chino, no vale un carajo.
Nos vemos en los próximos jalapos si la Virgencita lo permite.
