GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH) Diversas organizaciones defensoras de los inmigrantes se pronunciaron contra el rechazo en la cámara baja de la inclusión del plan de reforma inmigratoria en el proyecto de infraestructura introducido por el gobierno.
Representantes de esas agrupaciones realizaron pequeñas protestas frente a las oficinas de los legisladores de diferentes estados incluyendo Michigan.
Miembros de la Unión de trabajadores agrícolas y otras organizaciones están pidiendo a los senadores que ignoren la decisión de la “Parlamentaria” de no incluir la legalización de los trabajadores inmigrantes en el proyecto de infraestructura.
La parlamentaria del Senado, Elizabeth MacDonough, informó el miércoles a los demócratas que su más reciente propuesta para ayudar a millones de inmigrantes a quedarse permanentemente en Estados Unidos no puede incluirse en su iniciativa social y ambiental por $3.5 billones, lo que representa un nuevo revés en este tema.
Para muchos activistas en favor de la migración, uno de los principales objetivos de la iniciativa había sido incluir una oportunidad para la residencia permanente, y posiblemente la naturalización, para millones de inmigrantes.
Algo que también había sido la intención del presidente Joe Biden.
El miércoles un grupo de activistas se reunió frente a la oficina de la senadora demócrata Debbie Stabenow para pedirle que ignore la decisión de la funcionaria y vote a favor de la legalización.
Los representantes de las organizaciones explicaron las vicisitudes que sufren los trabajadores al vivir con inseguridad.
El abogado de inmigración Richard Kessler, quien participó en la protesta, dijo que ya van muchos años de lucha por legalizar la situación de los inmigrantes y que los legisladores no deben dejar de pasar esta oportunidad y por votar por el proyecto.
Así mismo el pastor Justo González recordó que el paso fronterizo fue establecido permitiendo que la gente cruzara cuando lo necesitara y que ya es tiempo de legalizar a los que ya viven aquí.
Por su parte la reverenda Rachael Bahr, de Plymount, Michigan, dijo que en su congregación hay personas inmigrantes, trabajadores que vinieron por sus hijos y llevan años esperando regularizar sus estatus. Dijo que los senadores tienen que saber que no pueden ignorar la posibilidad que tienen ahora de actuar en favor de las familias.
Edith y Lupita, dos representantes de la Unión de Trabajadores Agrícolas relataron sus historias como hijas de trabajadores inmigrante y la inestabilidad e inseguridad a que somete las familias la falta de documentación.
La Parlamentaria del Congreso MacDonough hace unas semanas, rechazó también una propuesta demócrata para otorgar estatus de permanencia legal a los inmigrantes conocidos como “dreamers” —aquellos que fueron traídos al país durante su infancia-, a trabajadores agrícolas y esenciales, y a aquellos que huyeron de ciertos países asediados por la violencia o desastres naturales. Estas propuestas pudieron haber beneficiado a 8 millones de personas, según cálculos de la Oficina de Asuntos Presupuestarios del Congreso.
MacDonough dictaminó que la propuesta inicial de los demócratas violaba las reglas del Senado que permiten cierta redacción en iniciativas fiscales especiales — como el paquete por 3,5 billones de dólares — sólo si su impacto primario es en el presupuesto federal y no en las políticas de gobierno.
