Por Andrés Abreu

 

GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH).  La inflación en Estados Unidos que se extiende a los países de economías dependientes del dólar como divisa, amenazan con provocar un incremento en las olas migratorias desde América Latina a la frontera norte de México.

Al mismo tiempo la escasez de alimentos provocada por la guerra de Ucrania y las sanciones contra Rusia amenazan con provocar una devastadora hambruna en África y al mismo tiempo una avalancha migratoria hacia los países de Europa y otros del mismo continente.

Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas Para la Alimentación (FAO), “Se prevé que el costo mundial de las importaciones de alimentos aumentará en 51 000 millones de dólares de los Estados Unidos con respecto a 2021, de los cuales 49 000 millones de dólares reflejarán unos precios más elevados. Se calcula que los países menos adelantados sufrirán una contracción del 5 % de los costos de sus importaciones de alimentos este año y que el África subsahariana y el grupo de los países en desarrollo, importadores netos de alimentos, registrarán un incremento de los costos totales, a pesar de la reducción de los volúmenes importados.”

El conflicto de Ucrania ha provocado un aumento sustancial de los precios de los cereales y los insumos agrícolas. Rusia y Ucrania producen más del 30 por ciento de los cereales que se consumen en el mundo.  El conflicto ha provocado serias dificultados en el transporte de estos hacia los países compradores además de que el aumento de los combustibles agrega una pesada carga al costo de estos.

Desde que empezaron a subir los precios de los combustibles debido a las sanciones de la importación de petróleo ruso por parte de Estaos Unidos y la Unión europea, las hordas migratorias desde Centro y Sur América han aumentado significativamente.

Según el Departamento de Inmigración de Estados Unidos las detenciones a inmigrantes que intentan cruzar ilegalmente la frontera subió en el mes de mayo un 33 por ciento en comparación con el año pasado y un dos por ciento en comparación con el mes de abril.

Según las autoridades fronterizas norteamericanas el actual incremento superó a los vistos en décadas en la frontera sur.

Los países de América Latina castigados por las sanciones norteamericanas como Cuba, Venezuela y Nicaragua son actualmente los más severamente golpeados por la escasez de alimentos y el aumento del costo de la vida.

De acuerdo a las autoridades fronterizas norteamericanas, la presencia de cubanos y nicaragüenses es más notable ahora que en años anteriores.

Señalan que también ha habido un incremento de inmigrantes colombianos.

La FAO concluye en su informe que “el aumento de los precios de los alimentos se acerca a su máximo histórico y que los precios de varios alimentos básicos han registrado grandes subidas en el último año”

Indica que “los sectores agrícolas están expuestos a limitaciones de oferta debido a los aumentos de los costos de los insumos, en particular de los fertilizantes y los combustibles, que podrían impulsar nuevas subidas de los precios de los alimentos.”

Sugieren los analistas de la FAO que la especulación de los productores y los comerciantes mayoristas y detallistas sumará nuevas cargas a las registradas por la escasez.
“Los altos precios de los alimentos suelen ser una ventaja para los productores, ya que se incrementan los beneficios de las explotaciones agrícolas. No obstante, la rápida subida de los costos de los insumos —causada por el aumento de los costos de la energía y las restricciones a la exportación de los principales fertilizantes impuestas por los principales agentes del sector (las sanciones)— compensa con creces esa situación, y en caso de prolongarse, provocaría inquietudes respecto de si la respuesta de la oferta puede ser tanto rápida como suficiente”.

“El repunte de los precios de los insumos plantea preguntas sobre la posibilidad de que los agricultores del mundo puedan permitirse comprarlos”, señalan Josef Schmidhuber y Bing Qiao, de la División de Mercados y Comercio de la FAO, en su capítulo especial sobre la dinámica de los elevados precios de los insumos, incluida en el informe.

Rusia y Urania también representan más del 30 por ciento de la producción de insumos agrícolas, y aunque la producción de estos no ha tenido una reducción sustantiva como consecuencia de la guerra, el transporte de los mismos, si.

En tanto, en Estados Unidos, donde la inflación ha llegado al 8.3 por ciento y la gasolina alcanza un precio promedio de mas de 5.00 dólares el galón, el presidente Joe Biden continúa anunciando nuevas medidas punitivas contra la producción de petróleo, cereales e insumos de Rusia.