MIAMI (AP) — Mitt Romney busca un triunfo contundente el martes sobre Newt Gingrich en las primarias de la Florida con miras a reposicionarse como el claro líder de la contienda para elegir al candidato republicano que desafiará al presidente Barack Obama en la elección general de noviembre.
Las encuestas muestran que Romney, ex gobernador de Massachusetts, lleva una ventaja de dos dígitos en la Florida, el cuarto estado y el más grande hasta ahora que organiza primarias.

Romney ha estado al frente durante gran parte de la contienda, pero el 21 de enero sufrió una sorprendente derrota ante Gingrich en las primarias de Carolina del Sur. Desde entonces ha repuntado, impulsado por sólidos desempeños en debates y un ataque agresivo contra Gingrich, ex presidente de la Cámara de Representantes.
Si Romney gana el martes es improbable que ello ponga fin a la candidatura de Gingrich. Pero Romney tendría un claro impulso en momentos en que la contienda entra en un período relativamente tranquilo con comicios de menor perfil, algunos en estados más afines a Romney, cuyo perfil es más moderado.
Este también tiene la ventaja de contar con más dinero de campaña, una organización nacional más fuerte y el respaldo de gran parte de los dirigentes republicanos. Los duros ataques de Gingrich a Obama y a las "élites" de los medios de comunicación lo han ayudado a colocarse como el principal rival de Romney, pero algunos republicanos lo ven como demasiado errático para ser un nominado o un presidente efectivo.
Otros dos candidatos, el ex senador Rick Santorum y el congresista Ron Paul, están bastante rezagados en Florida y en las encuestas nacionales.
En el lapso de una semana, la contienda ha sufrido un giro rotundo.
Gingrich arribó triunfante a la Florida tras su enorme victoria de hace nueve días. Pero desde entonces, Romney y sus aliados han lanzado una intensa oleada de ataques televisivos y en sus actos de campaña contra el ex presidente de la cámara baja.
Romney registró buenos desempeños en dos debates, mientras que Gingrich tropezó. Ahora los sondeos muestran que Romney lleva una cómoda ventaja en este estado y prácticamente está pronosticando su victoria.
"Con una participación electoral como esta, empiezo a sentir que podríamos ganar mañana", dijo animado a una multitud de varios cientos de personas en un mitin de campaña el lunes mientras él y Gingrich recorrían el estado para hacer sus exhortaciones finales.
A su vez, Gingrich reconoció que el impulso que llevaba ha menguado, pero prometió no bajar la guardia. Caracterizó a Romney como un impostor, y su equipo empezó a diseñar una estrategia para las primarias que vienen.
"Puede enterrarme por un período muy breve con cuatro, cinco o seis veces más dinero", afirmó Gingrich en una entrevista televisiva. "A la larga, el Partido Republicano no va a nominar... a un republicano liberal".{jcomments on}