(EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, instó hoy a Rumanía a mejorar la seguridad legal y luchar contra la corrupción para que puedan mejorar las relaciones económicas y comerciales bilaterales.
En la declaración que precedió a su encuentro en Berlín con el primer ministro rumano, Viktor Ponta, la jefa del Ejecutivo alemán enfatizó la importancia de trabajar en estas áreas y evitó abordar la polémica surgida en Alemania en torno a la integración completa de Rumanía en el espacio Schengen a partir de 2014.
Ponta, por su parte, aseguró que el tema principal en la agenda bilateral es la intensificación de las relaciones económicas y que su país quiere ser un "socio importante" para Alemania y la Unión Europea (UE).
El primer ministro rumano destacó que tras varios años de crisis su país ha logrado recuperar la estabilidad y que ahora está en disposición de seguir siendo un "socio estratégico" para Berlín, además de comprometerse a conformar un marco legal estable y "transparente".
El gran asunto ausente en sus discursos -pero que todos los expertos creen que se abordará en su cena de trabajo- es el temor alemán de que el ingreso completo de Rumanía en el espacio Schengen -que permite la libre circulación de nacionales entre fronteras- genere una oleada de inmigrantes a Alemania desde uno de los países más pobres de la UE.
En una entrevista difundida hoy por el "Frankfurter Allgemeine Zeitung", Ponta descartó un flujo masivo de inmigrantes rumanos a la mayor economía europea por diferencias lingüísticas y culturales.
"No habrá una gran oleada de trabajadores emigrantes rumanos a Europa Occidental. La mayoría de rumanos que han abandonado el país marcharon a Italia o España, países con un idioma, una cultura y una mentalidad similar a la rumana", argumentó Ponta.
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