GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH) . – Un grupo de personas se reunieron en el Calder Plaza de Grand Rapids para orar por las familias de los cinco jóvenes afroamericanos detenidos por la policía el 24 de marzo pasado.
Jacquetta Sims, madre de dos de los muchachos, dijo que hubieron conversaciones entre los funcionarios de la Ciudad y la policía de Grand Rapids, pero ninguna acción.
Sims también dijo que la cámara de cuerpo de los oficiales de policía, que captó el incidente demuestra que la policía de Grand Rapids necesita un mejor entrenamiento cultural.
"Cuando eres negro, una de las primeras cosas que aprendes de niño es que la ciudad no es un lugar seguro", Sims.
Allison Colberg, directora del The Micah Center, dijo que existe temor entre las autoridades de realizar cambios que se deben hacer, para que la igualdad sea un bien común en la ciudad.
“Hay miedo, del cambio. Hay temor en la policía de perder autoridad y hay miedo de admitir que las cosas no andan bien. Pero para avanzar, se tienen que admitir que se están haciendo cosas de manera equivocada”, manifestó Colberg.
Colberg, también dijo que el silencio está de parte de la policía de Grand Rapids y de la Ciudad, pero de parte de los activistas, es todo lo contrario.
“ El silencio está de parte de ellos, de nuestro lado no está el silencio. Si ellos no van a tomar acción, nosotros lo vamos hacer. Vamos a crear el poder, para demandar acción de su parte”, sentenció Colberg.De igual forma, se entregó una lista de pasos de acción a seguir que incluía llamar al alcalde y a los comisionados de la ciudad, para pedirles que compartan lo que están haciendo para enfrentar los prejuicios raciales en la policía.{jcomments on}
