Alarma en Latinoamérica por implantes mamarios deficientes
CARACAS (AP) — El consultorio del cirujano plástico
Ignacio Sousa está tan lleno que las mujeres tienen que hacer una cola
que sale de la sala de recepción. Hay estudiantes universitarias
veinteañeras, amas de casa cuarentonas, oficinistas de clase media:
todas tienen miedo de que sus implantes de senos se hayan desgarrado y
quieren saber cuándo se los pueden sacar.
Al igual que miles de mujeres en todo el mundo, numerosas latinoamericanas están consultando a sus médicos, temerosas de las consecuencias para su salud que puedan tener implantes mamarios defectuosos producidos por la ahora desaparecida compañía francesa Poly Implant Prothese (PIP). En algunos casos, los implantes, producidos con silicona industrial se han abierto, y esa posibilidad está haciendo que muchas mujeres los reemplacen.